Adicción

Adicción, una realidad que ataca a las familias
Todos los hogares enfrentamos diariamente dificultades que alteran la paz en nuestra casa, pero cuando tenemos un miembro con alguna adicción esto transtorna totalmente a la familia, alterando no solamente la vida del adicto sino la forma de relacionarse, llevándolos a convertirse en familias con un entorno inestable, impidiendo las expresiones sanas de amor y provocando la codependencia, la cual es la necesidad de controlar la conducta del adicto, preocupándose de manera excesiva por éste y dejando de lado sus propias necesidades.
La adicción es la dependencia respecto de una sustancia determinada de la que el individuo se siente que no puede prescindir y puede ser de índole fisiológico o psicológico. Desde una perspectiva más amplia, se considera como adicción a todo tipo de conducta dependiente, que limita la libertad de acción y decisión de una persona. Entre las adicciones más comunes podemos mencionar: el alcohol, las drogas, el sexo, el juego, la comida, el trabajo, el tabaco, compras compulsivas e internet.
“¿Por qué lo hace?” o ¿Por qué lo hago?”. Como seres humanos tenemos tres necesidades básicas: amor, reconocimiento y seguridad. Es allí donde el entorno en el que crecimos, los principios que nos enseñaron, los mensajes que recibimos en la infancia respecto a nuestra sexualidad y el saber que lo que somos es más importante que lo que tenemos, es fundamental; de todo esto surgen nuestras prioridades, decisiones, hábitos, rebeldías y hasta nuestra adicciones, porque si estas necesidades no se cubrieron de forma significativa desde nuestra infancia, el individuo intentará llenarlas con falsificaciones de amor; de reconocimiento y de seguridad reemplazándolas con cualquiera de las adicciones antes mencionadas.
El adicto es una persona con una enfermedad grave que perdió el control de su vida y necesita mucha ayuda, ¡pero cuidado!, ayuda y no alcahuetería. No intente resolverle todos los problemas y taparle las irresponsabilidades. Si usted tiene un adicto en su casa lo primero que tiene que hacer es: llevarlo a que acepte su problema, porque sólo en ese momento podrá empezar una verdadera rehabilitación.
Pongámonos en pie de lucha y evitemos que las adicciones destruyan nuestros hogares.






















